La logística inversa ha adquirido protagonismo en los últimos años debido a la creciente amenaza por el cambio climático. A día de hoy se trata de un factor crucial en la gestión de la cadena de suministro. Y aunque se pueda pensar en un primer momento que simplemente es otra forma de referirse a la logística 4.0, no es así.
¿Qué es exactamente la logística inversa?
Si la logística convencional se traslada el producto de un punto A a un punto B, en la logística inversa vuelve del punto B al punto A. Entendemos por logística inversa todas aquellas acciones destinadas a transportar las materias y/o productos desde el consumidor hasta el fabricante, ya sea por devolución o por recogida de residuos. Existen dos tipos de logística inversa:
- Logística de devoluciones: Devoluciones de productos por parte del cliente (sea cual sea el motivo). Es fundamental en el ecosistema logístico actual, sobre todo con el auge del comercio electrónico.
- Logística de residuos: Envíos de materiales para su reciclaje, destrucción u otros fines. Contribuye a reducir el impacto medioambiental generado por la industria y su importancia es inestimable para la sostenibilidad del mundo contemporáneo.
En general, logística inversa es todo lo que implica retorno de mercancía (recuperación y reciclaje de envases, exceso de inventario, residuos peligrosos, embalajes, devoluciones de clientes, productos obsoletos o inventarios estacionales) para su reutilización, reciclado o destrucción. Su objetivo principal es gestionar el flujo de productos, materiales y recursos desde el consumidor final hasta el origen de la cadena de suministro, con el fin de maximizar su valor y minimizar su impacto medioambiental.
La logística inversa se define por seguir las 3 erres: REDUCIR, REUTILIZAR y RECICLAR: con el objetivo principal de alargar al máximo la vida útil de los productos y así reducir sus desechos.
Ventajas en la logística inversa:
- Reduce la huella ecológica y mejora la sostenibilidad:
Al reciclar y reutilizar materiales, las empresas disminuyen la demanda de recursos naturales, contribuyendo así a la conservación de estos recursos para generaciones futuras. Además, la minimización de residuos que acaban en vertederos reduce la emisión de gases de efecto invernadero y la contaminación del suelo y del agua, alineando las operaciones de la empresa con objetivos globales de sostenibilidad.
- Reduce costes en la adquisición de materias primas gracias al reciclaje:
El reciclaje de productos permite a las empresas recuperar materiales que pueden ser reutilizados en sus procesos productivos, disminuyendo la necesidad de adquirir nuevas materias primas. Esto no solo reduce el costo asociado a la compra de dichas materias primas, sino que también puede disminuir los gastos de transporte y almacenamiento, impactando positivamente en la rentabilidad de la empresa.
- Abre nuevos mercados para los productos con un segundo ciclo de vida, por lo que genera nuevos beneficios:
La reintroducción de productos reacondicionados, remanufacturados o reciclados al mercado abre oportunidades en segmentos de consumidores que buscan opciones más accesibles o sostenibles. Esto no solo contribuye a la diversificación de ingresos, sino que también posiciona a la empresa como una opción innovadora y consciente del medio ambiente, captando así una base de clientes más amplia y leal.
- Ayuda a controlar el stock:
La gestión eficaz de devoluciones y excedentes mediante la logística inversa permite a las empresas mantener un nivel de inventario más ajustado y optimizado, reduciendo el riesgo de sobreproducción y obsolescencia. Esto mejora la eficiencia operativa y puede significar un mejor uso del espacio de almacenamiento y una reducción en los costos asociados con el mantenimiento de inventario no productivo.
- Mejora la relación entre clientes y proveedores:
Implementar prácticas de logística inversa efectivas demuestra compromiso con la satisfacción del cliente y la responsabilidad ambiental, lo que a su vez fortalece la confianza y lealtad de los clientes. Además, trabajar de cerca con proveedores para la devolución y reutilización de embalajes y materiales puede fomentar relaciones más colaborativas y eficientes, beneficiando a todas las partes involucradas en la cadena de suministro.
- Mejora la imagen de empresa:
Las empresas que adoptan y comunican activamente sus esfuerzos en logística inversa y sostenibilidad se benefician de una percepción pública positiva. Esta mejora en la reputación puede traducirse en ventajas competitivas significativas, como una mayor atracción de inversores interesados en la sostenibilidad, una mejor posición en el mercado frente a competidores menos responsables y una mayor fidelización de clientes que valoran las prácticas empresariales éticas y sostenibles.
El sector logístico no se caracteriza precisamente por ser de los más sostenibles, por lo que también existen algunos inconvenientes respecto a la aplicación de la logística inversa en sus industrias.
Inconvenientes en la logística inversa:
- La dependencia de los combustibles fósiles:
Aún no hay fórmulas eficaces que permitan al transporte desligarse de los carburantes que necesitan para su funcionamiento.
- El incremento de los vehículos de reparto:
El e-commerce posibilita la entrega de pedidos reducidos y muy heterogéneos, lo que multiplica los vehículos de reparto que ni siquiera llevan una carga completa.
- La falta de infraestructuras:
Las regulaciones para reducir las emisiones no contemplan la construcción de instalaciones que atienda las necesidades del sector logístico.
- La falta de inversión:
Dada la rígida competencia en el mercado, las empresas se ven obligadas a ofrecer tarifas reducidas y ajustar al máximo el margen de beneficios, lo que imposibilita la inversión en infraestructuras, automatización de procesos o sistemas de mantenimiento más eficaces.
- La falta de conciencia ciudadana respecto al coste de la logística:
Para el cliente, la logística es invisible; exige entregas en 24 horas que impiden las cargas completas y el aprovechamiento de flujos de transporte.
Ahora que entendemos un poco más sobre qué trata la logística inversa, debemos saber cómo aplicarla a nuestro día a día. Muchas empresas ya lo están haciendo, aunque si todavía hacen falta más detalles, aquí explicamos algunos de los consejos que se pueden integrar para que la aplicación de la logística inversa sea más fácil:
Consejos para la aplicación de la logística inversa:
- Política de devoluciones:
Estructurar los términos y condiciones para definir de antemano los procesos de devolución y reciclaje.
- Planificación de rutas:
Si marcamos unas rutas específicas, podremos optimizar recursos como el combustible o las horas trabajadas.
- Gestión financiera:
Tener un control en el almacén es básico, pero aún más para la logística inversa. Si no lo gestionamos como corresponde, llegaremos a tener exceso de inventarios, por lo que debemos establecer procesos adecuados de gestión para sostener el flujo de productos en el almacén.
- Comunicación con los clientes:
Tener contacto cercano y directo con los clientes asegura el entendimiento de la logística inversa, los plazos, los costos y las posibilidades.
- Captación de los empleados:
La formación de empleados es fundamental. Deben estar cualificados para ocuparse de todas las operaciones orientadas a la eficiencia para la logística inversa.
En WEGOX, la logística inversa no solo refuerza nuestras relaciones con proveedores y clientes, sino que también es clave para avanzar hacia una operación más sostenible. Mediante la integración de prácticas que promueven el reciclaje y la reutilización de materiales, no sólo mejoramos nuestra eficiencia y reducimos costos, sino que también reafirmamos nuestro compromiso con el medio ambiente. Así que, la próxima vez que devuelvas un producto o recicles, recuerda que estás contribuyendo en un ciclo mucho más amplio que tiene un impacto positivo en nuestro planeta, con WEGOX como tu aliado en esta misión.